Colegio de Santiago Alfeo o de Fonseca
En su arquitectura se suma el edificio colegial del siglo XVI, al que se añade, en los momentos postreros de esa centuria la llamada torre del Reloj. Después, con el inicio del siglo XVIII, se le añadirá, hacia el lado sur, un nuevo espacio dedicado a Hospedería. Ya en los años medios del siglo XIX, en tiempos del recordado rector Viñas, se dispone un jardín botánico – hoy abierto al público- en la parte posterior de este conjunto universitario que verá, en el siglo XX, como se acorta tal espacio ajardinado en su parte septentrional para ubicar ahí una nueva ala que se destina actualmente a depósito de fondos bibliográficos universitarios
El propio Alonso de Fonseca pondrá en marcha lo que se entiende, entonces, como un “Colexio Novo”, dedicado al apóstol Santiago Alfeo (A. Neira, 1850: 85-107; A. Odriozola, 1960: 25-35; J. M. Pita, 1960: 21-24; J. M. García Iglesias, J. M. Monterroso, 2000: 51-96; M. Vázquez, 2001: 525-573). Ahora se trata de levantar un edificio, en un espacio sito en el inicio de la Rúa del Franco, en donde una parte del solar era propio de su familia (vid. A. Fraguas, 1995: A. Goy, 1996; J. M. García Iglesias, 2016:) 36-39); tal como se indica en la inscripción del claustro, se cumple, de este modo, el deseo de “… que se edificase este Gimnasio en la casa de su abuelo materno” (Vid. M. C. Díaz, 1996: 330-331; 341-344). La traza de la parte más antigua se fecha en 1532 (J. M. García Iglesias, 1995: 30). Después se le añadirán, ya en las primeras décadas del XVIII, concretamente hacia la parte meridional, la hospedería y el cuarto rectoral; y hacia el norte, “un cuarto para libros”, que cubre el sitio existente entre la torre del Reloj (J. M. García Iglesias, 2013a: 38-39) y el Colegio de San Jerónimo (M. C. Folgar, 1995: 143).
Volviendo al epígrafe del claustro (Vid. C. Almuiña, 1995: 90-97 ) no deja de ser llamativa la denominación que se le otorga ya que la palabra griega “gymnasium” se ha de entender como lugar de instrucción para jóvenes; y también se dice, en relación con dicho lugar, que se levantó “… para que sirviese de grato solaz a las musas y ahuyentase las tinieblas”, lo que lleva, a quien redacta este texto, el catedrático Cadaval, en
En el friso de la puerta, que desde el claustro nos lleva al usualmente denominado Salón Artesonado – la antigua “General de Teología”-, discurre la siguiente inscripción: “Alfonsus Foncesa archiepiscopus fundador”. Se ha puesto en relación este sitio, en palabras de Freire y Barreiro, con el lugar en el que “…parece que nació el esclarecido prelado y allí mismo se erigía el altar en que se celebraba la misa solemne todos los años el martes del Espíritu Santo...” (J. M. Fernández, F. Freire, 1885: 217).
- magnificación del fundador (Vid. A. Neira, 1850: 7-17), que se relaciona con el propio Erasmo por 1527-1529 (Vid, M. Fernández Varela, 1799: 43-44; P. M. Caravelos, 1902: 326-336), está, por lo demás, omnipresente en este colegio (Vid P. M. Caravelos, 1901-1903: pp. 173-179, pp. 326-336, pp. 547-557, pp. 1901-1903.) ya que se nos señala su obra, también, en el citado friso que rodea el claustro y que debe de leerse en relación con el programa de medallones que lo adornan que, tal como indica Monterroso, bien pudo ser ideado por Lope Sánchez de Ulloa, rector y familiar del prelado (J. M. García Iglesias, J. M. Monterroso, 2000: 96). Es probable que quien figura en uno de tales medallones sea el propio Alonso III de Fonseca; hay que tener en cuenta que, cuando se realiza esta obra, ya había muerto, a los sesenta años, y resulta totalmente lógico que se nos muestre con una cierta similitud a otro en que se figura a Alonso II de Fonseca, en la puerta de acceso al claustro, en la catedral Compostelana (Vid. J. M. García Iglesias, 2013b: 167). En ese momento interesa presentar al tercero de los Fonseca como más joven, cuestión que aquí no tiene sentido; y es que. tal como indica Monterroso, en este mismo orden de cosas, “la iconografía del padre y del hijo termina por hacerse equívoca” (J. M. García Iglesias, J. M. Monterroso, 2000: 82).
Tal como cabe valorarlo en la actualidad este colegio, fundado por Alonso III de Fonseca en la primera mitad del siglo XVI, se utiliza, en buena parte del edificio, como Biblioteca Xeral de la USC. También cuenta con espacios dedicados a exposiciones, en la planta baja -fundamentalmente, su Salón Artesonado, la antigua General de Teología, y la capilla-, y en la superior, en las alas del claustro. Además, está aquí el denominado Salón Noble de Fonseca. Se suma a su anterior historia colegial la de haber sido lugar en el que se impartieron diversos estudios -Farmacia, Ciencias Políticas, Económicas y Comerciales (sección de Económicas, 1966)…- que tuvieron aquí su sede como también, por un tiempo, el propio Parlamento de Galicia en una etapa primera de la Comunidad Autónoma de Galicia.
C. Almuiña, 1995: C. Almuiña Díaz, “Estructuras claustrales. Los espacios ocultos de Compostela”, en MARTÍ ARÍS, C. (coord.), Santiago de Compostela como presente, Santiago de Compostela (Consorcio de Santiago), 1995, pp. 90-97.
P. M. Caravelos, 1901-1903: P. M. Caravelos, “Apuntes históricos sobre el colegio de Fonseca”, en L. Zamora Carrete (ed.) Galícia Histórica, I (1901), pp. 173-179; II (1902), pp. 326-336; III (1903), pp. 547-557.
M. C. Díaz, 1996: M. C. Díaz y Díaz, “Álvaro de Cadaval, primer latinista de la Universidad de Santiago: Unas notas”, Cuadernos de estudios gallegos, 43, 108 (1996), pp. 323-359.
J. M. Fernández, F. Freire, 1885: J. M. Fernández Sánchez, F. Freire Barreiro, Guía de Santiago y sus alrededores, Santiago (Imprenta do Seminario Conciliar), 1885.
M. Fernández Varela, 1799: M. Fernández Varela, Oración que a la inmortal memora del Sr. D. Alonso de Fonseca. Arzobispo de Santiago y Toledo… dico…, Madrid (Imprenta Real) 1799.
M. C. Folgar, 1995: M. C. Folgar de la Calle, “Santiago, una ciudad para los estudios universitarios”, en (catálogo de exposición), Gallaecia Fulget. V Centenario da Universidade de Santiago de Compostela (1495-1995), Santiago de Compostela (Universidade de Santiago de Compostela), 1995, pp. 140-155.
A. Fraguas, 1995: A. Fraguas, O Colexio de Fonseca, Santiago de Compostela (Consorcio de Santiago, Instituto de Estudos “Padre Sarmiento”, Universidade de Santiago de Compostela, 1995.
J. M. García Iglesias, 1995: J. M. García Iglesias, “El Colegio de Fonseca”, en (catálogo de exposición) Gallaecia Fulget. V Centenario da Universidade de Santiago de Compostela (1495-1995), Santiago de Compostela (Universidade de Santiago de Compostela), 1995, pp. 28-39.
J. M. García Iglesias, 2013a: J. M. García Iglesias, “La Torre de Fonseca”, Jael Joyas de Galicia, 5 (2013), pp. 38-39.
J. M. García Iglesias, 2013b: J. M. García Iglesias, Secretos de Catedral. La basílica de Santiago de Compostela a través de los tiempos y espacios, Santiago de Compostela (Alvarellos Editora- Consorcio de Santiago), 2013.
J. M. García Iglesias, 2016: J. M. García Iglesias, Minerva, la diosa de Compostela: espacios y obras a relacionar con el saber, Santiago de Compostela (Andavira Editora), 2016.
J. M. García Iglesias, J. M. Monterroso, 2000: J. M. García Iglesias, J. M. Monterroso, Fonseca: patrimonio e herdanza. Arquitectura e iconografía dos edificios universitarios composteláns (séculos XVI-XX), Santiago de Compostela (Universidade de Santiago), 2000.
A. Goy, 1996: A. Goy Diz, “Colegios de la Universidad”, en M. D. Vila Jato (coord.), El Patrimonio Histórico de la Universidad de Santiago de Compostela. Estudios, Santiago de Compostela (Universidade de Santiago-Parlamento de Galicia), 1996, pp. 30-43.
A. Neira, 1850: A. Neira de Mosquera, Monografías de Santiago: Cuadros históricos.-Episodios políticos.-Tradiciones y leyendas.-Recuerdos monumentales.-Regocijos públicos.-Costumbres populares, Santiago (Imp. de la Viuda de Compañel e Hijos), 1850. Cítase desde a edición: Santiago de Compostela (Ara Solis. Consorcio de Santiago), 2000, pp. 85-107
A. Odriozola, 1960: A. Odriozola, “El gran Alonso III de Fonseca: iniciación a su mecenazgo literario y musical”, El Museo de Pontevedra, 14 (1960), pp. 25-35.
J. M. Pita, 1960: J. M. Pita Andrade, “Alonso de Fonseca: párroco de Santa María, protector de las artes”, El Museo de Pontevedra, 14 (1960), pp. 21-24.
M. Vázquez, 2001: M. Vázquez Bertomeu, “El archivo de Alonso de Fonseca III, arzobispo de Santiago”, Estudios mindonienses, 17 (2001), pp. 525-573.