Francisco Asorey

Felipe Criado
José Manuel García Iglesias / Miriam Elena Cortés López

Nacido en Cambados (1889), vive en Santiago de Compostela desde 1918, año en que obtiene la plaza de escultor anatómico de la Facultad de Medicina. El vítor parte, en este caso, de un retrato, obra de Felipe Criado, datado en 1957; lo muestra en su taller, con Compostela como fondo. Se convierte en vítor, en 1969, en razón de la enmarcación que recibe, a la que se añade un texto, “Francisco Asorey/Escultor anatómico de esta Universidad/ (1889-1961)”, siguiendo criterios de Ramón Otero Túñez, decano de la Facultad de Filosofía y Letras.

Francisco Asorey (Cambados, 1889-Santiago de Compostela, 1961), además de ser docente en la Escuela de Arte Maestro Mateo, fue contratado para la Facultad de Medicina, en su oficio de escultor, para Anatomía. Desempeña eeste cargo de escultor anatómico hasta su jubilación, momento en el que se le rinden dos homenajes en la Universidad, uno de ellos en la Facultad en la que había trabajado; el otro, en la de de Filosofía y Letras (Vid. R. Otero Túñez, 1959, pp. 81-83).

Mediante el empleo del vítor, se representa al escultor Asorey para rendirle homenaje. En esta ocasión se trata de una adaptación del retrato que el propio Felipe Criado Martín hace del escultor, presentándolo como maestro, en su espacio de trabajo, acompañado de una pequeña escultura, elemento con el que se define su actividad artística.

Felipe Criado representa al escultor gallego Francisco Asorey en el interior de una estancia, en postura frontal y tres cuartos, apoyado sobre una mesa. El lugar podría corresponderse con algún espacio de su taller, en el que aparece en su parte posterior una ventana. A través de esta se puede ver un paisaje con algunas arquitecturas de fondo. Como sucede en el retrato de Rosalía, se anuncia la identidad de la ciudad jacobea, con la ayuda del perfil que generan las torres de la catedral compostelana en el último plano. En este caso no solo figura la Berenguela, sino las proyectadas por Casas y Novoa para la fachada Oeste.

A pesar de que no se visualizan instrumentos de trabajo, existen tres elementos que nos dan la pista de su actividad: dos libros que reposan en una mesa y la escultura de un santo que, por el atributo que porta, un tondo que encierra un cordero, podría tratarse de san Juan Bautista. Estos tres objetos lo definen como maestro escultor, ilustrado.

En este caso, el color vuelve a convertirse en protagonista, si bien los espacios todavía son definidos, claros y evidentes, a pesar de que la manera en la que se proyecta acusa el empleo de la perspectiva aberrante, por la cual la caja escénica en la que se desarrolla la acción se vuelca ligeramente hacia el espectador. En consecuencia, el suelo, la mesa y el brazo de la silla parecen romper directamente la barrera entre el marco real y el representado.

El vítor, como tal, entrará a formar parte del patrimonio universitario a partir de un acuerdo que se toma en la Facultad de Filosofía y Letras y consiste en solicitar a la familia del artista un cuadro realizado por Felipe Criado en 1957 (Libro de actas cit. Sesión del 17 de noviembre de 1968, en R. Otero Túñez, 1970, p. 292).

Será ya en 1969 cuando se cuelga en las aulas compostelanas aquel retrato ( Vid. R. Otero Túñez, 1959, pp. 67-68; R. Otero Túñez, 1970, pp. 292-293; R. Estevez, 1995, pp. 562-563; C. Pereira, J. Suárez Otero, 1996, p. 130; M. C. López Calderón, 2007, pp. 101-105). Así pues, fue hecho en vida de Asorey y rememorando el taller de un artista que había apreciado el valor de este cuadro en el que, al fondo, se ve Compostela y en el que, ante todo, se hace mención expresa a la individualidad del personaje, siguiéndose los dictados académicos aprendidos de Vázquez Díaz (M. C. López Calderón, 2007, p. 101).

El marco con el que se lleva a cabo la remodelación del retrato en vítor, combina “el recuerdo barroco y… las letras del “Victor” latino, entrelazadas y orladas por las simbólicas hojas de laurel”, al tiempo que es Mayer quien graba la placa metálica en la que se escribe el texto correspondiente (R. Otero Túñez, 1970, p. 192).

Aquí una lápida nos lo recuerda desde el siguiente epígrafe: “En lembranza de/ Francisco Asorey/ Escultor anatómico da Facultade (1889-1961). No seu 125 aniversario/ San Lucas 2014 por Candido Pazos”: “La pieza concebida por Pazos está elaborada en serpentina con incrustaciones de jade, incorporando una mano de azaira con pátina de bronce. La obra destaca la dimensión de Asorey como escultor anatómico de la facultad.” (Faro de Vigo, 18.10.2014, en http://www.farodevigo.es/portada-deza-tabeiros-montes/2014/10/18/escultor-escultor/1114018.html).

Francisco Asorey, tras su muerte el 2 de julio de 1961, será enterrado directamente aquí. Se hace en el suelo, sin monumento alguno, próximo a la tumba de Brañas. Una sencilla cruz se inscribe en el enlosado y, abajo, se dice, simplemente, ASOREY (Vid. J. M. García Iglesias, 2016, pp. 329-330, 342, 348-349).

Felipe Criado Martín (1928-2013) nació en El Musel-Gijón, pasó su infancia entre Asturias, Cataluña y Santander, y falleció en A Coruña. Se establece en Galicia cuando tiene nueve años, en Ourense y con posterioridad en Compostela, en tiempos de la Posguerra y desde ahí hasta la década de 1970. Durante esa época de 1940 comienza a desarrollar su interés por la práctica de la pintura, a la par que realiza los estudios de Medicina y Anatomía. Este hecho propicia que junto con Francisco Asorey profundice en cuestiones como el estudio de la anatomía artística, disección y modelado anatómico en escultura (1949-1952). Su siguiente etapa (1954-1959) vendrá marcada por su ingreso en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando.

Los años sesenta suponen para el artista su afianzamiento profesional como profesor, primero como catedrático de Dibujo, en Institutos Nacionales de Enseñanza Media, para posteriormente ser designado profesor de término por oposición libre de Anatomía Artística y Dibujo del Natural en Movimiento. En 1963 es designado director de la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos en Santiago de Compostela. En 1966 conseguirá la cátedra de Dibujo del Instituto Eusebio da Guarda, en A Coruña.

En cuanto a su faceta como artista-creador puede decirse que su reconocimiento es internacional, participando en numerosas exposiciones nacionales como Santiago, A Coruña, Vigo o Madrid, e internacionales como Los Ángeles -1973-, San Luis Obispo -1974- o Nueva York -1975-. La importancia de la obra de Felipe Criado se hace evidente por medio del respaldo de numerosos museos e instituciones públicas que la acogen: Museo do Pobo Galego, Pinacoteca da Universidade de Santiago, Pinacoteca de la Academia de Bellas Artes, CGAC, Museo Provincial de Lugo, Parlamento de Galicia o Salomon by Company de Londres. Entre otros méritos destacables, Felipe Criado fue miembro de la Real Academia Galega de Belas Artes. Recibió la Medalla de Plata de la Exposición Trienal de Pintura, Escultura y Grabado de Santiago de Compostela.

Por su trayectoria, Felipe Criado Martín engrosa la lista de artistas contemporáneos que se incluyen dentro de la historia del arte gallego. Es de esos artistas con identidad propia. Los trazos de su obra la identifican con el estilo reconocido tradicionalmente como Expresionismo Neobarroco. El universo Criado Boado lo configuran obras gráciles y alegres. En esta tarea se suman factores como la destreza, conocimientos en composición y modelado, producto de su formación en estudios anatómicos. Esto le permitió desarrollar obra puramente gráfica y pictórica. Óleos y murales, dibujos, acuarelas y técnicas mixtas como el linóleo son algunas de las técnicas que practicó.

En cuanto al empleo de temas, parece evidente su preferencia por los retratos, especialmente femeninos y también paisajes centrados en escenas marítimas. Aunque en su trayectoria artística, coincidiendo que el apogeo de su carrera profesional ⸺años sesenta⸺, se percibe un primer momento de mayor pesimismo, pronto se aprecia un cambio radical, quizá el más significativo de su obra, con la recreación de un mundo idealizado, repleto de gozos vitales. Detrás de rasgos característicos de su obra como la ingenuidad e inocencia que desprenden sus dibujos, suavizados por el empleo de la curvilínea, así como su gusto por el arte figurativo, se acusa la influencia de artistas maestros en el empleo y estudio de los colores: El Greco, Zuloaga, Benjamín Palencia o Matisse fueron algunos de sus referentes.

R. Estévez, 1995: R. Estevez,“Retrato de Francisco Asorey”, en (Catálogo de Exposición), Gallaecia Fulget. V Centenario da Universidade de Santiago de Compostela (1495-1995), Santiago de Compostela (Universidade de Santiago de Compostela), 1995, pp. 562-563.

J. M. García Iglesias, 2016: J. M. García Iglesias, Minerva, la Diosa de Compostela. Espacios y obras a relacionar con el saber, Santiago de Compostela (Andavira Editora- Consorcio de Santiago), 2016, pp. 329-330, 342, 348-349.

M. C. López Calderón, 2007: M. C. Calderón, “Artistas para a memoria”, en (Catálogo de Exposición) Sigillum. Memoria e identidade da Universidade de Santiago de Compostela, Santiago de Compostela (Universidade de Santiago de Compostela), 2007, pp. 101-112.

R. Otero Túñez, 1959: R. Otero Túñez, El escultor Francisco Asorey, Santiago de Compostela (Imprenta Paredes), 1959.

R. Otero Túñez, 1970: R. Otero Túñez, “Los últimos vítores de la Universidad Compostelana”, Cuadernos de estudios gallegos, XXV, 77 (1970) pp. 290-298.

C. Pereira, J. Suárez Otero, 1996: C. Pereira, J. Suárez Otero, “Los fondos artísticos”, El Patrimonio Histórico de la Universidad de Santiago de Compostela. Catálogo, en VILA JATO, M. D. (coord.), Santiago de Compostela (Universidad de Santiago de Compostela- Parlamento de Galicia), 1996, pp. 83-155.

X. A. Castro, 2014: X. A. Castro, Felipe Criado. Homenaxe, catálogo de la exposición, Santiago de Compostela, Xunta de Galicia, 2014.

M. E. Cortés López, 2018: M. E. Cortés López, Pegadas sobre papel: o gravado galego no Museo do Gravado á Estampa Dixital de Artes, Ribeira, Fundación Museo de Artes do Gravado á Estampa Dixital, 2014.

F. Criado y M. A. Fernán-Vello, 1987: F. Criado y M. A. Fernán-Vello, Felipe Criado, catálogo de la exposición, A Coruña, Caixa Galicia, 1987.

F. Criado y J. Lens, 2004: F. Criado y J. Lens, Felipe Criado, catálogo de la exposición, A Coruña, 2004.

S. García-Bodaño, 1985: F. Criado y J. Lens, 37 debuxos para un país, Sada (A Coruña), Ediciós do Castro, 1985.

R. Pereiro y A. Castro, 2000: R. Pereiro y A. Castro, Felipe Criado: pinturas e debuxos: 1989-1999, catálogo de la exposición, Santiago de Compostela, Xunta de Galicia, 2000.

VV. AA., 1985: Felipe Criado. 4 variantes para 14 posibles temas, Oviedo, Centro Regional de Bellas Artes de Asturias, 1985.

VV. AA., 1993: “Felipe Criado” en Galicia Arte. Arte Contemporáneo I, vol. XVI, A Coruña, Hércules, 1993, p. 173.

VV. AA., 1997: Felipe Criado, catálogo de la exposición, A Coruña, Fundación Caixa Galicia, 1997.

VV. AA. 2008: Felipe Criado, Santiago de Compostela, 2008.

VV. AA., 2011: Felipe Criado: dende as vivencias 2007-2010, catálogo de la exposición, Ourense, Diputación Provincial.

VV. AA., 2014: Felipe Criado: inicio de catálogo razonado, 1952-2012, A Coruña, Diputación Provincial.

Ficha técnica

Número de referencia: IBC0000100
Autoría: Felipe Criado
Título: Francisco Asorey
Temas: 
Retrato
Masculino
Datos: 1957
Técnicas: 
Óleo
Dimensiones: 
Sin marco:  Alto: 140,5 cm  Ancho: 95,5 cm Con marco: Alto: 191 cm  Ancho: 119 cm 
Materiales: 
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