Se trata de un retrato adquirido en subasta. Es obra de Antonio María Esquivel, realizado en Madrid en mayo de 1852; este pintor romántico utiliza un cortinaje verde, una silla roja, una pilastra clásica y un globo terráqueo. Fontán (1788-1866), vestido de etiqueta, lleva en su mano derecha un compás y apoya la otra sobre un mapa dispuesto sobre una mesa. Lleva en su pecho, desde 1848, la distinción que le otorga Isabel II; Caballero de la Real y distinguida Orden Española de Carlos III.