Ha de ser, en relación con una importante donación que hace a la Biblioteca de la Universidad, desde su testamento, como cabe explicar el encargo de este cuadro. El personaje, sentado, se ambienta, en cierto modo, en Fonseca, porque se le presenta con el bastón de mando, propio de un rector, cargo que ostentó, y, bajo su mano derecha, la beca roja, tan característica de los retratos vinculados a ese colegio. Su pecho lo adornan tanto la medalla como la Gran cruz de la Orden de Carlos III. Es el suyo un retrato de madurez, indudablemente inspirado en el estilo de Vicente López pero que debe de corresponder a una autoría de alguien que trabaja en Compostela; quizás, Cancela del Río.